miércoles, 30 de noviembre de 2011

Herramientas en la cocina

¡Hola, desastres! ¿Cómo va todo? Hoy vamos a hablar de esos cachivaches y bultos del hogar que harán nuestra labor culinaria mucho más fácil.

No hace falta gastarse mucho ni tener mil trastos para cocinar cosillas apañadas. Os voy a enseñar lo que necesitareis para hacer mis recetas igual o mejor que yo. Empezamos:

  • Bol de plástico. 
En este campo hay gran variedad de precios y formas. Yo los prefiero altos, amplios (para amasar un poco dentro, por ejemplo) y con pico vertedor para que sea más fácil pasar las masas a sus moldes o a otros recipientes.

  • Palas de silicona o lenguas de cocina.
Me encantan, son super útiles y pueden salirte muy económicas. Recogen muy bien los restos de masa del bol, para mezclar cosas delicadas son lo mejor (y que la masa no pierda aire!) y también te pueden ayudar a la hora de despegar una masa, por ejemplo de pan, de la mesa.

  • Báscula de cocina.
Muy importante si quieres que la receta te salga "perfecta". También hay jarras medidoras pero no son lo mismo, no son tan exactas y muchas veces tienen fallos. Hoy en día casi todo el mundo tiene, pero si eres de esos que les gusta medir en tazas o yogures también hay recetas para ti y pronto subiré varias.

  • Batidora de varillas.
Esto quizás suponga una inversión inesperada, pero si vas a meterte en repostería seguro que le sacas provecho. Para montar la nata, los huevos, las claras, la mantequilla, es lo mejor. Si no la tienes siempre puedes hacer recetas más facilitas y darle al tenedor o las varillas de mano.

  • Moldes para horno. 
Los hay desmontables, de silicona o cristal. Eso va en función de vuestros gustos, yo me quedo con los desmontables, los forras con papel de horno y el bizcocho saldrá perfecto, sin peligro de que se te rompa.

  • Cápsulas de papel, bolsas de congelar y papel de hornear. 
Aquí tenemos los desechables. Son económicos y se encuentran en cualquier supermercado. Las bolsas nos sirven para verter la masa en las cápsulas o moldes especiales sin derramar nada y para hacer formas sobre el papel de hornear, como es el caso de algunas galletas.


Estos son mis imprescindibles en la cocina, junto con el horno, claro! Todo lo demás es sustituible con algo de ingenio. 

Ya tenemos las herramientas, ahora ¡al trabajo! 

martes, 29 de noviembre de 2011

Magdalenas donuts


¡Que empiece la fiesta! Aquí está la primera receta del blog. Magdalenas donuts, se llaman así pero no saben a donuts. La receta la cogí del blog Dulces Bocados, uno de mis favoritos, nunca me ha fallado una receta.


Parece complicado, pero si me han salido a mí os pueden salir a vosotros. Sólo hay que medir los ingredientes más o menos bien y seguir los pasos.

Ingredientes:

- 1 huevo grande (a temperatura ambiente mejor).
- 170 gr. de harina normal.
- 150 gr. de azúcar.
- 2 cucharaditas de levadura tipo Royal.
- Una pizca de nuez moscada molida.
- 175 ml. de leche (más o menos).
- 60 ml. de aceite (yo me pasé fijo).
- Una cucharadita de aroma de vainilla.

Elaboración:

  1. Precalentar el horno arriba y abajo con ventilador a 170º.

  1. Batimos el huevo entero con el azúcar con una batidora de varillas hasta que quede de un color muy clarito y coja un poco más de volumen.

  1. Añadimos la harina colada, la levadura y la nuez moscada y mezclamos con cuidado con una pala de silicona. No hace falta que quede homogéneo.

  1. Ahora le ponemos la leche, el aceite y la vainilla, lo mezclamos con la pala. Aquí es cuando pensé: “mierda, la he liado otra vez”. Tranquilos, es normal que cueste mezclarlo todo, que se quede con grumillos. El resultado es una masa blanquecina y más bien líquida (con pequeños grumos, al menos la mía). 

  1. Para servir la mezcla en las cápsulas de papel yo la meto en una bolsa de congelar y le corto una esquinilla. Así me resulta más cómodo, pero se puede poner con cuchara. Esta vez he rellenado las cápsulas casi hasta arriba, como se puede ver, pero tenéis que tener en cuenta que tienen que subir.

  1. Hornear 15-18 minutos con la bandeja en la altura del medio del horno y con función abajo ventilador. Si ponéis calor por arriba las magdalenas no subirán igual. Sobre este tema puedo escribir una tesis doctoral, si tenéis dudas de lo que sea respecto a hornos escribidme. :)

  1. Para rematar, este tipo de magdalenas llevan un acabado especial. Derretimos en el microondas unos 10 gr. de mantequilla y pintamos con ella las magdalenitas. Después las pasamos por el bote del azúcar y… ¡listas!


Quedan tan bonitas, tan esponjosas, tan buenas con el toque de mantequilla… las mejores que he hecho en mi vida. Son ideales para acompañar con un chocolate calentito o café. 

Ánimo, seguro que os salen genial. 

lunes, 28 de noviembre de 2011

Inútiles entre fogones


La mayor de mis pasiones es la repostería, todo lo que tenga que ver con aromas y sabores dulces me encanta desde que tengo uso de razón. Siempre he sido muy golosa y desde hace unos años me atrevo a cocinar algunas cositas. Quizás a mis amigos y conocidos les extrañe saber esto pero… soy un desastre en la cocina.

Ciertamente soy, salvando las distancias, una farsante. Una inútil de la cocina con mucho empeño. Lo que normalmente a la gente les presento como “Oh! Si es facilísimo! Eso lo puede hacer hasta un ornitorrinco!”; es fruto de peleas, nervios, lloros en ocasiones… desastres al fin y al cabo. Si no se me corta la mezcla se me pega la masa, si no se me quema el bizcocho se me olvida la levadura. Siempre, siempre la lío, pero el resultado sorprendentemente es positivo, una genialidad de la que sentirse orgulloso.

Entonces, ¿cómo es posible? De un momento a otro paso del “Soy una inútil, todo me sale mal, siempre la cago (con perdón) en algo!” a “Qué bien me ha salido, si es que me sale todo lo que me propongo…” Pues el otro día haciendo la tarta de cumpleaños de mi hermana pequeña me di cuenta: TODO tiene solución, la repostería y la cocina en general son un arte, con muchas posibilidades y sobre todo son IMPREDECIBLES.

Este blog es para animar a la gente que cree que no tiene mano en la cocina, que todo le sale mal. Estamos hartos de blogs con preciosas fotos y resultados de libro. También a veces ocurren desastres, esos nadie los enseña, claro… pero, ¿por qué no?

¡Adelante inútiles! ¡Manos a la obra!

Mi super cocinita